Historia, Misión y Visión

Los estudiantes de la PRIMERA CLASE (1961-1964)

Luis Alberto Cid, Presidente; Héctor Abreu Delgado; Delia M. Auffant De Lugo; Iván Ayala Cádiz; José Enrique Ayoroa Santaliz; Calixto Calero Juarbe; Wilfredo Colón Pagán; John Luis A. De Passalacqua; Sonia M. Del Valle Rivera; William Feliciano Ruiz; Julio Figueroa Quiñones; Francisco A. Galiano Toro; Margarita García Santiago; José R. Gauthier Colón; Francisco Guzmán Rivera; Delia Lugo Bougal; Pedro Malavet Vega; Rafael Martínez Rivera; Carlos Martínez Texidor; María J. Méndez Purcell; Israel Molina Robles; Manuel R. Purcell Requena; Dinorah R. Requena Gallego; Manuel Rivera Lebrón; Dolores Ruiz Soto; Cristóbal Sánchez Sánchez; Juan E. Santana Suárez; Relín Sosa Ortiz; Arcadio Toro Goyco; Federico A. Toro Goyco y Orlando Velázquez Iglesias. El lema de la clase: “Ab initio, ab infinitum”. (Hombres 24, Mujeres 7). La celebración de la primera Clase Graduada de la Escuela de Derecho de la Universidad fue el 22 de mayo de 1964, de lo cual vale mencionar que revalidaron todos los estudiantes, destacándose como excelentes abogados.

Entre los primeros alumnos de la Escuela figuran: Iván Ayala Cádiz, quien fue Secretario de Asuntos del Consumidor y quien se desempeñó como Juez Superior en la Sala Superior de Ponce del Tribunal de Primera Instancia; John Luis Antonio De Passalacqua Christian, quien estuvo dedicado a la enseñanza, durante más de treinta años, en la Escuela de Derecho de la Universidad de Puerto Rico; Lady Alfonso de Cumpiano, quien fue Secretaria General del Tribunal Supremo y jueza del Tribunal de Circuito de Apelaciones; Calixto Calero Juarbe, quien fue senador; José Enrique Ayoroa Santaliz, quien es un abogado distinguidísimo, líder muy reconocido en la ciudad de Ponce y un gran humanista y orador; y Pedro Malavet Vega, quien ha escrito varios libros de temas jurídicos y de otros temas y además de destacarse en la profesión jurídica, también se desempeñó como profesor de Derecho en la Facultad de Derecho Eugenio María De Hostos.

Nuestros egresados continúan destacándose en muchos ámbitos ocupando posiciones importantes en y fuera de nuestro país en el campo del derecho. Son jueces en nuestros tribunales, fiscales, secretarios de la Rama Ejecutiva, senadores, representantes, etc. Ejemplo de ello es nuestro exalumno, el honorable Efraín E. Rivera Pérez quien es juez asociado del Tribunal Supremo de P.R.

En el mismo año de su fundación, se creó la Revista de Derecho Puertorriqueño, la cual es la publicación oficial de la Escuela de Derecho de la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico. Fue fundada por el entonces profesor y decano Carles E. Mascareñas. Fue creada con el fin de desarrollar y fomentar la educación jurídica de excelencia y calidad. Desde entonces, mediante artículos de fondo sobre problemas actuales de Derecho, análisis de legislación, jurisprudencia y recensiones de libros, los más distinguidos estudiantes, profesores y juristas contribuyen desde la palestra del Derecho al fortalecimiento de valores y a la difusión de alternativas que puedan ser de utilidad al quehacer de la justicia.

La Escuela de Derecho recibió la acreditación del Consejo de Educación Superior de Puerto Rico el 13 de abril de 1964. Luego recibió la aprobación provisional de la American Bar Association en febrero de 1967 y la acreditación final en agosto de 1972. Estuvo en probatoria en el 1995, pero en el 1996 obtuvo nuevamente la acreditación total. El programa de Juris Doctor (J.D.) está dividido en dos grupos: diurnos y nocturnos. También la Universidad cuenta con el programa de admisión en enero. El mismo se creó teniendo en mente a estudiantes que terminen sus estudios de bachillerato en diciembre. De este modo, estos estudiantes pueden adelantar un semestre y un verano.

El Comité de Acreditación de la American Bar Association, en una reunión celebrada en el mes de abril de 2010, volvió a reacreditar a nuestra Escuela de Derecho, permaneciendo en la lista de Escuelas de Derecho aprobadas por dicha asociación.

Para el 1975, a 14 años de la fundación de la Escuela, se proyectó fuera del aula universitaria la Clínica de Asistencia Legal, que en los orígenes de la Institución se limitaba a la Corte de Práctica, la cual era simulada o actuada. En el primer año de existencia de la Clínica, el Decano y otros abogados actuaban como supervisores de los estudiantes autorizados a practicar en su último año. Al comenzar la Clínica, los estudiantes actuaban solamente en casos civiles. El personal secretarial lo constituían estudiantes practicantes del Departamento Secretarial de la misma universidad. En la actualidad, la Clínica de Asistencia Legal les brinda a los estudiantes en su último año de estudio su primera exposición a la práctica de la profesión jurídica, dándole la oportunidad de poner en práctica los conocimientos adquiridos durante sus primeros dos años de estudios. Se ofrecen servicios jurídicos de excelencia a personas de escasos recursos, se brindan servicios de orientación, asesoría y representación jurídica en áreas de derecho civil, justicia juvenil, derecho penal, derecho hipotecario y gozamos con un centro de Mediación de Conflictos. Existe el programa interno y externo. Los programas internos se dividen en litigación civil, menores, penal, ejecución de hipoteca y mediación. En el programa externo los estudiantes pueden actuar como oficiales jurídicos y administrativos en el Tribunal Supremo, Tribunal de Apelaciones, Tribunal de Primera Instancia, Tribunal Federal y el Departamento de Asuntos del Consumidor. En adición se pueden destacar en la Sociedad para la Asistencia Legal, la Corporación de Servicios Legales de P.R., Departamento de Justicia y abogados en la práctica privada.

El 19 de agosto de 1983 la Escuela de Derecho de la Universidad Católica de Puerto Rico inauguró formalmente el Centro de Estudios Jurídicos Avanzados (CEJA). Durante su primer año académico 1983-1984, cuarenta (40) juristas y abogados altamente capacitados y provenientes de las más diversas esferas de la profesión, fueron admitidos como candidatos al grado de Maestría.
Ya en mayo de 1985, se graduó la primera clase graduanda, marcando un hito histórico en la educación jurídica en Puerto Rico. Esta última, compuesta por veintitrés (23) estudiantes, entre los cuales se encontraban un legislador (el presidente de la Comisión de lo Jurídico del Senado de Puerto Rico), varios jueces, abogados dedicados al servicio público y a la práctica privada, y profesores universitarios.
El Programa de maestría estaba acreditado por el Consejo de Educación Superior de Puerto Rico, la sección de Educación Jurídica del “American Bar Association” (ABA), y la Junta de Regentes de la Universidad del Estado de Nueva York. Otra contribución de singular importancia histórica en el desarrollo de la educación jurídica en Puerto Rico fue que el Centro también ofrecía un Programa Doctoral en Derecho Civil y Derecho Penal, en consorcio con las facultades de Derecho de las prestigiosas universidades españolas de Valladolid y Salamanca. El programa doctoral con la Facultad de Derecho de la Universidad de Valladolid fue cancelado en el año 2002 y en el 2016 se ha retomado, donde varios de nuestros profesores están cursando su doctorado. En estos momentos se están haciendo esfuerzos para ofrecer estudios de post grado que aporten al enriquecimiento de la cultura jurídica puertorriqueña.
El Programa de (CEJA) luego se propuso ofrecer una perspectiva interdisciplinaria del Derecho que le permitiera al estudiante entender el sistema jurídico como parte integral de una totalidad social. Se priorizó indistintamente en el estudio comparativo del Derecho, y a esos efectos se trajeron profesores visitantes para ofrecer cursos, seminarios o conferencias, a la vez que se organizaron viajes de estudio al exterior (por ejemplo, Heidelberg, República Federal de Alemania, Cuba y España). En referencia a este último mencionado, el (CEJA) ofreció, en coordinación con la Fundación José Ortega y Gasset, un Programa de Verano en España centrado en el estudio de las nuevas tendencias del Derecho Civil. El Programa de estudios de verano en España fue autorizado por el ABA durante los años 1989-1990. El objetivo de este programa es ofrecer a los estudiantes una experiencia dinámica y única específicamente diseñada en el contexto comparativo del estudio del Derecho. El programa se encamina también a exponer a los estudiantes a las nuevas experiencias culturales que contribuyan a mejorar su formación como juristas. El Programa de Verano de España es de especial importancia para la educación jurídica en Puerto Rico, esto debido a las raíces españolas de nuestro derecho civil y el valor persuasivo que aún tienen en Puerto Rico. En adición nuestros estudiantes participan de los internados ofrecidos a través de otras Escuelas de Derecho.